Comienza un nuevo curso y, con él, los centros educativos que integran la red PLANEA vuelven a ponerse en marcha con iniciativas que apuestan por otras maneras de hacer escuela integrando en su estrategia educativa habitual el poder transformador del arte. Se trata del tercer año de desarrollo de la red, que se ha propuesto abarcar cinco para prototipar, evaluar y recopilar aprendizajes sobre cómo implementar la educación artística en las aulas de manera transversal.
Llega septiembre y, junto a la red de arte y escuela PLANEA, nos preparamos para una “vuelta al cole” muy diferente a la anterior. Inicia el curso con la esperanza de que la mejora de la situación sanitaria permita una mayor presencialidad y un entorno en el que desarrollar más plenamente el trabajo en equipo y las artes. Una oportunidad para poder disfrutar nuevamente de los patios y espacios comunes junto al alumnado y el profesorado, además de poner en práctica todos los aprendizajes del último año, ese en el que demostramos una capacidad de adaptación necesaria para afrontar las circunstancias.
Cada nuevo curso es una oportunidad para la red PLANEA de seguir trabajando con los centros educativos, agentes e instituciones comprometidos a utilizar las prácticas artísticas en la escuela pública de manera transversal y situada en los territorios en los que está implantada: Andalucía, Comunitat Valenciana y Madrid. Como en los cursos anteriores, durante este nuevo año lectivo seguiremos impulsando desde la red iniciativas elaboradas de forma conjunta por artistas y docentes, con un claro potencial para estimular la sensibilidad y el espíritu crítico en el alumnado en torno a los retos sociales contemporáneos. Propuestas que no se limitan al aula de arte o a una asignatura concreta, sino que se expanden de forma transversal a todas las especialidades abordando los retos educativos propios de los docentes, integrando las prácticas artísticas en el currículo y potenciando los aprendizajes.
El regreso a las aulas es también ilusionante al comprobar cómo la red va creciendo: los centros pilotos rozarán la quincena y los centros colaboradores superarán ya los 50 colegios. Además, el curso 2021/2022 permitirá poner en marcha los planes y programas diseñados en los últimos meses junto a las consejerías, instituciones culturales y centros de formación del profesorado de cada comunidad autónoma en las que la red está implantada.
Favorecer el intercambio de experiencias entre pares
Seguir fortaleciendo la comunidad que integra la red PLANEA es también una prioridad en este curso que comienza. Junto a los encuentros regionales celebrados por los centros educativos de cada Comunidad Autónoma, el curso 2021/2022 celebrará el primer encuentro estatal presencial en el que participarán todos los miembros de la red. Tanto artistas, docentes, consejeros y expertos en Arte y Escuela pondrán en común sus experiencias al mismo tiempo que analizarán la situación de los centros, los logros alcanzados y se plantearán los próximos pasos a seguir en la hoja de ruta común. Un espacio en el que relacionarse, intercambiar visiones y establecer nuevas alianzas para seguir contribuyendo a la plena integración del arte en las aulas como herramienta educativa complementaria y transdisciplinar. Además, esperamos contar también con la participación de los compañeros de PEGASE, la red hermana que impulsamos en Francia, para enriquecer el encuentro con sus experiencias y fomentar el codiseño de iniciativas que poder poner en marcha en ambos territorios.
Compartir y capitalizar las experiencias desarrolladas por los centros de la red es fundamental para su continuidad. Por ello, durante el nuevo curso verán la luz los nuevos números de las publicaciones de la red Planea: la revista ANIDA y el segundo Cuaderno PLANEA que en este caso recogerá experiencias, tanto dentro como fuera de la red, sobre cómo modificar los espacios, la arquitectura y el entorno para generar nuevos lugares más adecuados para la actividad educativa usando en particular estrategias artísticas.
Un año de giros y vueltas
Si algo caracterizó el curso 2020/2021 en las escuelas fueron los constantes cambios. La reducción de la presencialidad, los grupos burbuja o los formatos híbridos generaron nuevas formas de desarrollar la actividad docente, muy alejadas de los modelos habituales a los que tanto alumnado como profesorado estaban acostumbrados.
Las medidas sanitarias adoptadas en los centros exigían fortalecer lazos de colaboración e impulsar una red de cuidados mutuos a través de la cual compartir dudas, preocupaciones y soluciones extrapolables a otros centros que buscaban nuevas formas de docencia. Como parte de esta necesidad de intercambio y viralización de saberes, el curso comenzó con el lanzamiento del Centro de Recursos de la red PLANEA, un espacio en el que se reúnen diversos materiales dirigidos a docentes y profesionales de la educación formal que sirvan para activar la práctica artística en los procesos de producción de conocimientos y aprendizajes tanto dentro como fuera de las aulas.
Con ese mismo espíritu, se presentó el Cuaderno PLANEA, recopilando los aprendizajes de la red durante su primer año de andadura, y la revista ANIDA, la primera publicación académica de la red coeditada en esta ocasión junto a Campo Adentro y fruto de un llamamiento público para seleccionar recursos educativos que afrontasen la emergencia climática y social a través de las prácticas artísticas en la escuela.
Durante estos meses, los centros piloto y colaboradores de la red han puesto en marcha iniciativas que han buscado mejorar la convivencia escolar, afrontar el reto bioclimático desde las aulas o generar nuevos espacios adecuados para la enseñanza en tiempos de pandemia. Iniciativas que además de enriquecer la experiencia educativa, no sólo del alumnado sino también del profesorado ilusionado por aceptar estos nuevos retos, han supuesto un alivio necesario, una manera de liberar las emociones vividas en un año tan tenso, de reírnos y disfrutar de otras formas posibles de hacer escuela.
Estas experiencias han sido puestas en común a través de cursos y diferentes encuentros, tanto regionales como estatales, que han servido para reforzar la red y la comunidad de agentes colaboradores comprometidos por una escuela pública en la que las prácticas artísticas sean utilizadas de forma transversal y situada en la enseñanza.
Al mismo tiempo, durante el pasado curso se ha valorado la adhesión de nuevos centros piloto y colaboradores en la red, así como la expansión de la red a otras comunidades autónomas, algo que esperamos pueda concretarse a lo largo de este nuevo curso que comienza, expandiendo su acción y poniendo en valor los proyectos de Arte y Escuela en todo el territorio nacional para demostrar que este tipo de iniciativas no han de ser una excepción o un privilegio, sino que es una posibilidad fácilmente accesible en la enseñanza pública.
Desde la Fundación, estamos muy felices de ver el progreso de la red PLANEA y su capacidad para generar nuevos imaginarios, nuevas sensibilidades y un pensamiento crítico cada vez más necesario a través de las posibilidades que el arte puede ofrecer a la educación formal. Estamos seguras de que acabaremos este nuevo curso con una nueva mochila llena de experiencias y recursos que seguir compartiendo con la comunidad educativa.
Créditos de las imágenes: red PLANEA